Heladería Sajuba

Lunes de helados, pero la semana pasada no visité ninguna heladería. ¿Pueden creerlo? Pero me había quedado en el tintero una buenísima heladería que visitamos en Mercedes. Así que acá va el cuento que es una continuación de nuestro fin de semana en Mercedes en enero.

Eventualmente llegó el día en que nos volvíamos a Montevideo. Llegamos a la terminal de ómnibus muy temprano y decidimos cruzar a la plaza a hacer tiempo. Hacía un calor tremendo y en eso vemos en la vereda de enfrente un local rosado como el chicle. Imposible no verlo. Y con gran alegría vemos que era una heladería. Sajuba.

Entramos cuando no había nadie. Era la hora de la siesta o de estar en la paradisíaca rambla dándose un baño en el Río Negro así que no era de extrañar que estuviera vacía. Eso nos dio tiempo para elegir nuestro helado. Una vez más compramos el más chico que era un vasito de dos bolas. El Brazo pidió chocolate amargo y mantecol. Yo me sentía atrevida y me fui por café oriental y chocolate amargo. Y esperé con ansias el gusto exótico del café oriental sin saber si era café vietnamita o café de chicoria de la Banda Oriental. Al principio no me gustó, era un poco raro, pero al final me acostumbré y se hizo un buen complemento del chocolate amargo. El Brazo se sacó la lotería con su mantecol porque yo le robé un poquito y estaba delicioso. El chocolate amargo era de primera línea, casi igual que el de Freddo pero como verán por la mitad de su precio.

Cuando ya estábamos por terminar nuestros helados empezó a llegar gente hasta llenar el local. No sé si los mercedarios tienen hora para tomar helado, pero se ve que es a eso de las 4 de la tarde.

Si llegan a Mercedes en ómnibus, no dejen de probar los helados de Sajuba. Y si van en cualquier otro medio transporte vale la pena salirse del centro para probarlos.

Consumición: 2 helados chicos ($35 c/u) = $ 70

Tiene Wi-Fi

Sajuba

Gral Artigas esq. Don Bosco

Mercedes, Soriano

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Rufo´s

Y la comilona en Mercedes no se terminó en el Topo Gigio. Cuando nos despertamos de la siesta, nos dio hambre de nuevo. Hora de la merienda. Preguntamos dónde estaba la panadería y nos mandaron a Rufo´s.

Rufo´s está en una esquina preciosa. Con su look tradicional por afuera y por adentro, no hay como engañar al estómago para que empiece a largar jugos gástricos. Había masitas y bizcochos de todo tipo y especie, fue difícil decidirse. Pero al final nos llevamos unos bizcochos finos muy tentadores y diferentes a lo que vemos normalmente en Montevideo. Seleccionamos unos croissants rellenos de frutas secas y unos arrollados de manzana.

Todo estaba verdaderamente delicioso y si hubiéramos estado más días en Mercedes hubiéramos vuelto a probar otras cosas. El precio también era tentador, 6 bizcochos por $48. Ya estoy preguntando si hay alguna casa a la venta en las manzanas vecinas; Mercedes y Rufo´s puede hacer que me vuelva a mudar de ciudad.

Por último en homenaje al Encuentro de Jazz de Mercedes los dejo con una foto de uno de los espectáculos.

Consumición: 6 bizcochos finos= $ 48

Rufo´s

Gral Artigas esq. Paysandú, Mercedes, Soriano

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Heladería Topo Gigio

El Brazo y yo nos fuimos a Mercedes a disfrutar del Encuentro de Jazz a la Calle. Y como no podía ser de otra forma, nos tuvimos que sacrificar investigando el mercado goloso de la ciudad. El primer hallazgo no demoró mucho en aparecer. En la Plaza Independencia se encuentra la heladería Topo Gigio. ¿Quién se iba a resistir a semejante promoción? Si el Topo Gigio era el rey del coqueteo con aquellas caídas de ojos y sus solicitudes de besitos de las buenas noches.

Seducidos completamente por el nombre, pedimos el helado más chico. Nos vendieron una antorcha chica a cada uno (como le llaman a los helados clásicos que no se venden por bolas). Valía $38 y se podía pedir 2 sabores. El Brazo pidió chocolate y frutilla; yo pedí chocolate y sambayón. Son artesanales muy ricos y con ese precio imbatible. La antorcha resultó ser tan enorme, más grande que la antorcha olímpica. Es tan enorme que ya te la sirven en bandeja porque si te la dan verticalmente tendrías que comerla desde el piso. ¡Un escándalo de antorcha; como para un incendio!  

Así y todo, nos comimos nuestros helados y nos relamimos los bigotes como si fueramos hijos del mismísimo Topo. Quedamos tan satisfechos que los dos dijimos al mismo tiempo “A … la … camita” seguido de “Lo dije yo primero”.

Consumición: 2 antorchas chicas ($38 c/u) = $ 76

Heladería Topo Gigio

Colón, entre E. Giménez y De Castro y Careaga

Mercedes, Soriano

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