domingo, 9 de marzo de 2014

Alfajor El Artesanal de Minas


No sé si ustedes, queridos lectores, trabajan en una oficina. Yo, de vez en cuando, también. Y el día más odioso es cuando voy y me olvido de llevar alguna merienda dulce. Porque la ley de Murphy dice que esos días van a ser los días mas complicados de la semana y que me va a venir una angustia oral de aquellas que no se arregla con cualquier galletita de maquinita tragamonedas. Me toca salir a la calle a buscar algo. Y si supieran donde trabajo, se darían cuenta que no es moco de pavo.

Hace poco me aventuré por el barrio tipo Far West y llegué a un kiosko al que no entraba en décadas. El kiosko estaba lleno de gente así que me dio unos minutos para hacer mi selección. De pronto vi unos alfajores que nunca había visto antes en mi vida. Se llaman El Artesanal de Minas y tenía un tamaño generoso, proporcional al ataque que me había llevado a arriesgar mi vida por esas calles del señor.

Volví , apenas salva, a mi escritorio y procedí a la cata. A pesar de no ser alfajor de chocolate, me gustó mucho. Todo muy suave, con bastante dulce de leche y abundante baño blanco de ese que cuando mordés parece que estuvieran en una Navidad blanca del hemisferio norte porque tú y tu alrededor quedan llenos de copitos de baño azucarado.

Y así, con mi cuota de dulzura, pude encarar el resto de esa tarde complicada. Si recibía alguna otro grito de parte de mis superiores, simplemente pasaba un dedo por los remanentes blancos sobre el teclado. Algunos compañeros que no vieron el alfajor original, miraban con desconfianza dicha práctica y me sospecho que la próxima vez que vaya por la oficina me van a hacer alguna pruebita anti doping. Todo lo que van a encontrar es exceso de glucosa.

A veces hay que ponerle doble dosis de azúcar a la vida. Y ahora sé que El Artesanal de Minas cumple bien dicha función.\
         

Consumición: 1 alfajor ($25 c/u) = $ 25

Alfajor El Artesanal de Minas

No encontré nada en Internet sobre el alfajor




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2 comentarios:

  1. Hola. Me paso un caso similar al tuyo, tambien trabajo en una oficina, solo que mi alfajor, a pesar de lo delicioso q estaba, apestaba a humo. Desconozco el motivo, quizas se le prendio fuego la fabrica mientras los elaboraban, o sufrieron algun tipo de ataque terrorista promovido por alguna fabrica de alfajores multinacional para evitar la competencia. Lo que si puedo decir es que si no fuera por el sabor y olor a humo, la calidad, el tamaño y el sabor son inigualables.

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    1. jaja. Me río con tu anécdota aunque me imagino que no debe haber sido muy gracioso cuando estabas comiéndolo. No sé cuándo te pasó pero capaz que era un alfajor que vendían en el algunos de los shoppings incendiados :-)

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